Es un problema común que ocurre en personas mayores con hipertensión y arteriosclerosis, en quienes se rompen unos vasos que se encuentran en la mácula. Si llegan al consultorio en el momento adecuado y se realiza una fotografía, se podrá determinar si tienen esta condición y también se podrá identificar si la hemorragia es reciente, ya que será visible en la foto. Esto se conoce como maculopatía húmeda. En este caso, el uso de Avastin ayudará a reabsorber la sangre y detener la pérdida de visión. Sin embargo, cuando ya es demasiado tarde, se forma una cicatriz y entonces se trata de una maculopatía seca, en la cual el Avastin no tiene ningún efecto. Este asunto del Avastin puede generar malas interpretaciones y hacer que el paciente reciba muchas inyecciones costosas de este medicamento sin obtener ninguna solución, ya que se encuentra en el estado «seco».
La verdad sobre la maculopatía es que cuando yo examino al paciente, en la mayoría de los casos la mácula ya está seca, porque ha pasado suficiente tiempo para que se reabsorba la hemorragia y quede una cicatriz. Por lo tanto, veo que casi todos los pacientes gastarán mucho dinero recibiendo esas inyecciones de Avastin.
El Avastin es efectivo para tratar a pacientes diabéticos y otras alteraciones vasculares dentro del ojo.
La retinografía está incluida en el precio de la consulta.